Después de 3 partidos sin perder y recuperando poco a poco el ánimo llegó una nueva derrota, esta vez sin nada que reprochar a los jugadores puesto que se dejaron todo en el campo, pero la mala suerte no quiso que puntuaramos esta jornada.
La semana comenzaba después de un empate en la jornada anterior frente a la Almudena en un partido que aparentemente teníamos controlado con un 3-1 a favor, pero que finalmente por nuestros fallos de concentración se nos escapó y acabamos regalando un punto a un rival directo por el descenso.
En las sesiones de entrenamiento del martes y jueves todo parecía indicar que el cambio de actitud había llegado por completo, debido a la intensidad que los jugadores imponían en los ejercicios y las sensaciones que se percibían desde el banquillo eran muy buenas.
Así llegó el domingo de partido con un alineación con algún cambio respecto a las semanas anteriores y con dos jugadores que no estaban ni de lejos al 100% debido a lesión y enfermedad.
El partido comenzó con dos goles muy tempraneros uno en cada portería pese a que el dominio del juego fue nuestro. Durante la primera parte tuvimos muchas ocasiones para sentenciar el partido pero entre los palos, el portero rival y nuestra falta de acierto de cara a portería no pudimos ir al descanso con el marcador a favor. Y con empate a uno comenzó la segunda parte y en el segundo 16 nos metieron el segundo gol del partido, en la primera jugada de la segunda parte. Nosotros a pesar de ese fallo continuamos atacando e intentando meter el gol del empate aunque nos resultó muy difícil aparte de por las razones que he dicho antes se añadió otra, y fue que todos y cada uno de los pases largos o cambios de orientación que se realizaban eran fuera de juego y el árbitro no tenía muchas ganas de moverse del centro del campo. A pesar de esa razón añadida tuvimos más oportunidades que no aprovechamos hasta que en el minuto 58 Ivan consiguió hacer el segundo gol para poner de nuevo las tablas en el marcador. Ahí la remontada se percibía y la desesperación del rival daba pie a ello, pero el partido siguió en la misma dinámica, un golpeo constante en las dos porterías cabe decir que nuestras oportunidades llevaban más peligro que las del rival y no fue hasta el minuto 87 cuando el marcador se movió la pena es que fue del lado del Coslada, y así se quedaría el resultado 3-2.
Después de un partido así no nos queda otra que mirar hacia adelante y pensar en el partido que viene por que contra la mala suerte no se puede hacer mucho. La parte negativa es que cada vez somos menos efectivos en el equipo ya tenemos dos bajas y esperemos que se quedé ahí la cosa, por que el que está en este equipo sabe que es para luchar y competir por un puesto en el 11, nadie regala nada.
En cualquier equipo hay que luchar por un puesto. El que quiera peces que se moje el c....
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